viernes, 17 de enero de 2014

El barco fantasma

                      El barco fantasma

El club de Tea: Violet, Paulina, Nicky, Pamela y Colette


Se acabaron las vacaciones de verano, el club de Tea trajo unos quesos riquísimos de París.
Violet deseaba asistir a las clases de biología marina, para ver al profesor Van Kraken, Violet esta enamorada de él.
El profesor habló sobre el Queen Moussy, el barco hundido que transportaba un valiosísimo diamante, el Corazón de Yasmina.
El profesor dijo que iban a ver el nacimiento de las tortugas de agua al día siguiente.
Al día siguiente, no apareció Van Kraken, nadie sabía donde estaba, el club de Tea decidió ir en su busca, fueron al laboratorio de él, las puertas estaban cerradas, entonces Nicky escaló hasta la ventana, entró y abrió la puerta a las chicas, solo se escuchaba el sonido de una ballena, lo descifraron y el mensaje decía SOS, ¡alguien estaba en peligro!
El club de Tea fue a la gruta del viento y se sumergieron con un traje de submarinismo, vieron todo el paisaje de la cueva, incluso el Queen Moussy, se veía un submarino probablemente el que decía SOS, dentro estaba, ¡el profesor Van Kraken!
Pamela condució el submarino, no duró mucho, porque estaba bollado y el motor un poco estropeado.
Cuando salían unos hombres intentaban coger el tesoro que Van Kraken lo había cogido para dejarlo en la universidad, sano y salvo.
El capitán Corolis las salvó, pero las chicas no sabían que era el jefe de los hombres que atracaron a las chicas, entonces el capitán las encerró en la planta baja del barco.
Van Kraken llamó a la guardia costera, Violet, por el ojo de buey pidió ayuda, entonces el guardia la vio, detuvieron al capitán y lo enceraron en la cárcel.
Los padres de Violet llamaron a la universidad para decirle al rector que el club de Tea se iba a Pekín, a ver el concierto de ópera, Turandot, lo interpretaba los padres de Violet.
En el avión, Violet preparaba una lista de cosas que tenían que hacer en Pekín.
Xiao, un amigo de Violet, las recogía y las llevaba al hotel.
Violet llevó a sus amigas a dar un largo paseo, al cabo de un rato estaban todas cansadas entonces se fueron para el hotel.
Al día siguiente  Violet llevó a sus amigas a un mercado, Paulina compró cinco piedras preciosas, una para cada una y Colette compró una caja lacada para guardar las piedras, en el interior había un dibujo de la princesa de Jade, una mujer, llamada Madame Ho quería la caja que Colette había comprado, dos hombres empezaron a perseguirle, lo malo era que Madame Ho tenía mil hombres en la ciudad y le podían atrapar, el club de Tea corrió hasta el coche y se fueron al hotel.
Eran las ocho de la tarde se acostaron, Violet tuvo un sueño y en él salía la caja y cuatro más, de mayor a menor, formaba un dibujo, el de la Gran Muralla China y sus amigas estaban maniatadas y Violet las rescató. Se despertó del sueño y amontonó las cajas en el mismo orden que las vio en el sueño, salía lo mismo, las chicas se levantaron y lo contemplaron, se vistieron y se fueron a explorar.
Violet sabía que Jade era una princesa que quería piedras osea diamantes preciosos, los que no le gustaban los tiraban al río, por eso Madame Ho quería la caja.
A una larga distancia se veía una casa, tanto como en la caja como en vida real.
Fueron hasta la casa, se alojaba una viejecita, ella sabía lo de la princesa de Jade.
Pegaron a la puerta de la viejecita, era ¡Madame Ho!
La viejecita engañó a Madame Ho dándole una caja falsa y a las chicas le indicó que vayan camino por el sendero todo recto.
Las chicas siguieron el camino y habían árboles llorones, apartaron las ramas y había un hermoso río, Colette, Nicky, Pamela, Paulina y Violet se acercaron, había un arco iris, lo producía las piedras que había tirado Jade, las chicas dijeron que nunca iban a tocar esa preciosidad.
La viejecita llamó a la policía por lo de Madame Ho, de mientras que las chicas estaban en el río, llegaron las chicas y vieron que estaban deteniendo a Madame Ho.
La viejecita le dio al club de Tea el Jade de la verdad, el que la princesa de Jade quería, la viejecita era antepasada de la que se lo entregó a Jade.
Las chicas del club de Tea se lo dieron a Tea Stilton, la hermana de Gerónimo Stilton.



                                   Fin

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